Cambios
psicológicos en la adolescencia
En la adolescencia,
etapa evolutiva de transición entre la niñez y la adultez, se producen cambios que podríamos englobarlos
en tres grandes grupos: Cambios Físicos,
Psicológicos y Sociales.
Acompañando los distintos cambios
físicos, que los nuevos adolescentes experimentan, en su cuerpo y que están relacionados con el crecimiento y con la preparación
de los órganos para la reproducción, suelen devenir importantes cambios
psicológicos. Los que se correlacionan con la aceptación y adaptación al nuevo
cuerpo, el cual evidencia una apariencia muy distinta al cuerpo de niña/o. Los
principales cambios que se suscitan en la adolescencia tienen que ver con tres cuestiones generales: la propia identidad, la relación con su familia y las demás
personas y lo que quieren ser.
Los
cambios psicológicos en la adolescencia están íntimamente relacionados a los
sociales ya que les sobreviene el querer pertenecer, el querer
ser parte y el querer ser aceptado, conduce a los adolescentes a nuevas
situaciones sociales y un cambio en las relaciones.
La relación con sus
padres ya no va a ser la misma que cuando éstos eran niños. Por el contrario,
se va a producir un distanciamiento de ellos, pudiendo ser lastimoso para ambas
partes. Pero los nuevos adolescentes
van a querer pasar más tiempo con aquellos que estén viviendo una situación
similar, pasando, de esta manera, a afianzar su grupo de amigos. Por lo tanto cabe resaltar que la búsqueda y
construcción de la propia identidad es una de las cuestiones más relevantes que
atraviesan esta etapa de la vida.
A medida que los cambios físicos y mentales se van sucediendo, el
adolescente comienza a cuestionar lo establecido y a preguntarse por su propia
existencia y las características de la misma. Lo peculiar es que responde a
esos interrogantes a partir de lo que arroja su contacto con otros.
El hombre es un ser en relación y por lo tanto necesita de sus pares
para desarrollarse. Es en la adolescencia, cuando el proceso de identificación,
que actúa como cimiento para la construcción de la identidad, se produce a
partir de la interacción con personas de la misma edad.
Surgen así, diversas conductas según se esté “dentro” o “fuera” del
grupo de pertenencia. En relación a esto último, muchas veces el adolescente
desarrolla prácticas inusuales y riesgosas para su integridad con tal de
“formar parte”.
En este sentido, la psicología muestra cómo un adolescente se
encuentra en una búsqueda permanente de sí mismo, en la creación de una
identidad que explique su existencia y le dé un sentido a la vida. Es lo
que se conoce como crecimiento personal, maduración, en el que el adolescente se encuentra en conflicto consigo misma e intenta buscar un
carácter independiente y único. Todas estas alteraciones mentales y
fisiológicas que experimenta un joven son propias de la edad evolutiva que atraviesa y les servirán
para afrontar los retos durante su etapa de adulto. Pero vale aclarar
que durante el transcurso de la misma a veces surgen conflictos
vinculares con su entorno, en especial con sus padres. Debiendo
aprender a adaptarse a situaciones que al principio les resultarán
incómodas, pero con el paso del tiempo irán aceptándolas.
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